RIZOMA

FOTOGRAFÍA de Pura María García

La noche borra los caminos

en los que se van amontonando

los frutos del insomnio.

A un lado y al otro

los postes metálicos indican

la parada del pensamiento

cuando el anochecer desdice con su obscuridad

la ilusoria claridad de la mañana abierta.

Nos sirve aferrarnos a las creencias

que sentimos como un rizoma interno,

dar nombre a los objetos, a aquello que nos duele

a la identidad, la nuestra, a la que creemos ver

según el cardinal punto desde el que nos miramos.

Nos sirve, para vivir, desdeñar la presencia constante

de la muerte,

contradecir la evidencia de que no hay evidencia

permanente,

ni probada razón

que no titubee ante el argumento

manantial del pensamiento.

Nos sirve este sonambulismo

que cada noche, todos, practicamos.

Nos sirve para encontrar, en la cercanía del silencio,

la imaginaria luz que nos persigue.